Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Llevo el Sur,
como un destino del corazón,
soy del Sur,
como los aires del bandoneón.
Sueño el Sur,
inmensa luna, cielo al reves,
busco el Sur,
el tiempo abierto, y su después.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Te quiero Sur,
Sur, te quiero.
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Vuelvo al Sur,
llevo el Sur,
te quiero Sur,
te quiero Sur...
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Llevo el Sur,
como un destino del corazón,
soy del Sur,
como los aires del bandoneón.
Sueño el Sur,
inmensa luna, cielo al reves,
busco el Sur,
el tiempo abierto, y su después.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Te quiero Sur,
Sur, te quiero.
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Vuelvo al Sur,
llevo el Sur,
te quiero Sur,
te quiero Sur...
Música : Astor Piazolla
Letra: Fernando "Pino" Solanas
3 Comments:
El sur es, sin lugar a dudas, una localidad olvidada por lo ignoto. Un pequeño infierno apocado en vértigos. El sur es el aire frío que no cesa, la sensación íntima de una constante decadencia, un morir lento, apacible.
El sur es, si el oxímoron no se equivoca (y que esto no lo olvide quién tuvo al sur como su dulce acogedor de mocedades y jolgorios), una condición encomiable. Encomiable sí, pero en la lejanía; una lejanía clara, mundana, llena de anhelos que miran septrentionalmente hacia el horizonte, un horizonte que no puede ser menos que la ubicuidad transmutada en la ironía de un onírico triunfo postrero.
Pero… a pesar del visor sucio de la distancia, nadie puede no sentir al sur como la recaída anhelada, la mochila fría que no quieres sacarte. El sur es el lugar del fuego en medio de una conversación de viejos. El lugar de padres tiernos, amigos sonrientes, familias tibias y abrazos abotagados de cariño. El sur ay!!! El sur ay!!!
Un abrazo, desde el septentrión.
sur, mi sur, tu sur
inevitablemente
el sur está allí y aquí
bello y montaraz
sur,
me vuelvo, miro mi patio llovido, miro tu dibujo
sur
un abrazo
Me encanta la ilus, y de la musica ni hablar, hermosa!
Publicar un comentario
<< Home